Escribe: Angélica Beltrán
La presidenta del Senado, la morenista Ana Lilia Rivera, adelantó que se espera un álgido debate en el análisis y virtual aprobación de las reformas que enviará el presidente López Obrador al Congreso de la Unión; con las que se abonará –hasta el último minuto de su mandato—a dejar vigentes leyes que den sustento a la transformación del país.
Entre estas está la reforma al Poder Judicial, en la que se propone que los ministros de la Suprema Corte sean elegidos en las urnas, por voto popular; a fin de dar un halo de compromiso social a estos jerarcas de la in-justicia, a decir del presidente Obrador.
Otra de las iniciativas de reforma que llegarán en los próximos días a las Cámaras de Diputados y Senadores, será la reforma a la ley federal del trabajo, para que el salario de los trabajadores nunca más sea menor al de la inflación; y para que las pensiones sean del 100 por ciento del salario del trabajador al momento de jubilarse.
Los temas sin duda serán motivo de encontronazos políticos entre la oposición que conforman PAN-PRD, y simuladamente PRI y MC, pues están en juego las ganancias de la clase empresarial por el tema laboral; y porque la “justicia” ha sido un botín jugoso para un amplio círculo, siendo que el Poder Judicial ha gozado de opacidad, corrupción y rapiña inusitadas.
La cuestión es que el “estira y afloja” entre oposición y MORENA estará candente en el último periodo de la legislatura que finalizará el 31 de agosto próximo; por lo que la senadora por Tlaxcala, ha mencionado la importancia de desplegar todos los dotes políticos de los morenistas para alcanzar los consensos necesarios para la aprobación de estas; ya que el partido en el poder no cuenta con la mayoría calificada.
Así, el ajuste de votos será una misión para el senador Ricardo Monreal en la Cámara Alta, quien con toda seguridad regresará a ocupar la coordinación de la bancada y la presidencia de la Jucopo, ante la licencia, en febrero, de Eduardo Ramírez, candidato de MORENA al gobierno de Chiapas.
El éxito de la misión en busca de votos se prevé posible para el zacatecano Monreal, ya que en tiempos electorales a la oposición se le ablanda la voluntad –según el histórico en el Congreso de la Unión; esto, porque es tiempo de reparto de “utilidades” electorales.
La clase trabajadora de AMLO. En el tema laboral, queda preguntar: –qué tanto ha importado la clase trabajadora al gobierno del presidente Obrador. Creemos que la defensa a los trabajadores no ha sido pareja.
Para muestra dos casos:
La extinción de un medio de comunicación del estado, Notimex, en el gobierno de AMLO es comparable a la acción iniciada por el presidente Carlos Salinas en 1993 para extinguir el periódico El Nacional, órgano informativo del Estado; y que concluyó Ernesto Zedillo, en el siguiente gobierno.
Y los trabajadores de la mina de Cananea en Sonora, golpeados en su contrato laboral por el secretario del trabajo Javier Lozano, en tiempos de Felipe Calderón. Y aun siendo bandera de la entonces oposición, hoy en el poder; no se ha dado solución para retornar las inmejorables condiciones de trabajo de las que gozaba este emblemático gremio; cuyo centro de trabajo fue cuna de la Revolución Mexicana.
