Hermosillo, Sonora.- La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES) obtuvo una sentencia condenatoria de 76 años y 4 meses de prisión tras probar ante los tribunales la responsabilidad de José Carlos “N”, Jorge Alberto “N”, y Adán Isaac “N” de los delitos de homicidio calificado, homicidio calificado en grado de tentativa y asociación delictuosa, cometidos en contra de los comunicadores Carlos Andrés “N” y Reynaldo “N”.
Con base en diversos actos de investigación tanto de campo como de gabinete, se logró integrar una carpeta con sólidas pruebas, mismas que al ser presentadas ante el juzgador resultaron contundentes para demostrar la culpabilidad de los señalados.
De esta manera se logró comprobar la participación de los sentenciados en los hechos ocurridos el 16 de febrero de 2019 en la intersección de bulevar Serna y calle California, cerca de las 17:50 horas.
En dicho lugar y fecha, los sentenciados, a bordo de un vehículo de la marca Chevrolet, línea Trax, cerraron el paso a las víctimas; quienes circulaban a bordo de un vehículo Chevrolet, línea Beat, cerca de la mencionada intersección de Serna y California, de la colonia Las Pilas, al oriente de Hermosillo, Sonora.
Tras esto, utilizaron diversas armas de fuego, entre ellas un rifle calibre 7.62 x 39, así como una pistola calibre .38 súper y un arma calibre .40, dispararon en contra de las víctimas, privando de la vida en el lugar a Reynaldo “N”.
De igual forma, atentaron contra la vida de Carlos Andrés “N”, a quien lograron herir de gravedad sin consumar su intención de privarlo de la vida, ya que este realizó acciones defensivas, como lo fue bajar de la unidad y correr para refugiarse entre unos montículos de tierra ubicados en un predio baldío aledaño a la calle.
Lo anterior fue acreditado ante el representante del Poder Judicial, por lo que se solicitó por parte de esta representación social la pena más alta procedente en derecho, a lo que el Juez determinó sentenciar a los sujetos a la mencionada pena de 76 años y 4 meses de prisión, misma que purgarán en un Centro de Reinserción Social (CERESO).