Ciudad Obregón.- El tiempo nos ha traído hoy a conmemorar el primer aniversario luctuoso de un sonorense ejemplar.
La ausencia física de Abel Murrieta Gutiérrez, padre, esposo, abuelo, hijo y hermano, llenó de luto a una familia a la que respetamos.
A un año de su partida, familiares, amigos, ex compañeros y muchos sonorenses que lo conocimos, seguimos esperando que se haga justicia; que las autoridades responsables cumplan con su palabra de que este crimen no quedaría impune.
La natural esperanza que se generó con el cambio de gobierno, se desvanece ante el silencio de las autoridades y la cotidiana noticia del aumento de la violencia de alto impacto en el estado.
Desde Movimiento Ciudadano, hemos mostrado nuestra preocupación por el lento avance de las investigaciones; lo hicimos por escrito y lo hemos realizado en audiencia con la titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora y aunque debemos reconocer que fuimos atendidos con la debida cortesía, la triste realidad es que los nulos resultados mostrados hasta hoy, asoman el despreciable rostro de la impunidad.
Ha llegado el momento de reconocer que en materia de procuración de justicia las cosas no andan bien; que la diaria evidencia nos muestra que la violencia nos ha rebasado; ha llegado el momento de confirmar que la ausencia de políticas públicas, de planeación estratégica y la permisividad de los gobiernos anteriores nos llevó a un rotundo fracaso; pero también, a reconocer que el nuevo modelo desde lo nacional hasta lo local, no está dando los resultados prometidos, así lo afirman la frialdad de las estadísticas, así lo confirma la percepción de los ciudadanos de Sonora y el país.
Lamentablemente las consecuencias del fracaso, están dando lugar a la tragedia que viven miles de hogares sonorenses que han perdido a un ser querido, miles de hombres y mujeres de todas las edades con nombre y apellido que no debieron morir.
Pese al dolor que esto representa debemos asumir que es el momento de reaccionar; es el momento de que los gobiernos entiendan que no se trata de defender resultados inexistentes, de que los funcionarios defiendan cargos para los que no están preparados; ha llegado el momento de que los ciudadanos entendamos de que el camino no es el autocompadecimiento, que el primer deber del estado nacional es nuestra seguridad y que los ciudadanos tenemos el derecho de exigirla.
Lograr el propósito de restablecer la paz en Sonora resulta inaplazable, hay que devolver la esperanza en un futuro de grandeza para los sonorenses; es indispensable hacer evidente la vigencia del estado de derecho; se requiere certeza, se requiere recuperar la confianza en nosotros mismos y en las instituciones responsables de impartir justicia.
Al cumplirse el primer aniversario luctuoso de Abel Murrieta Gutiérrez, honremos su memoria comprometiéndonos por un Sonora de dignidad y de progreso, por el Sonora en paz por el que entregó su vida, por eso hoy exigimos justicia, por eso reclamamos resultados de las autoridades. Aquí todos cabemos, hagamos de nuestro estado un mejor lugar; el Sonora en el que queremos vivir.
Mtro. Jesús Manuel Scott Sánchez
Coordinador de la Comisión Operativa Estatal de Movimiento Ciudadano en Sonora
Hermosillo, Sonora; a 13 de mayo de 2022.