
Hermosillo, Sonora.- Exige justicia madre de Paula Josette, joven que murió en Cereso de Hermosillo en 2024; pide que culpables sean castigados.
La madre de Paula sigue exigiendo que se haga justicia, tras más de un año del siniestro en la capital sonorense y pide que las familias, que viven casos similares, no dejen de luchar nunca.
El caso de Paula Josette, sigue indignando a gran parte de la comunidad sonorense, tras más de un año de su asesinato, su madre, Briceida Arizona, no ha dejado de insistir en que se haga justicia, haciéndose presente durante la marcha del “8M” en Hermosillo.
“Principalmente (marcho) por todas las mujeres que tenemos muertas y desaparecidas, pero lo que más me adolece en este momento, es la perdida de mi hija, Paula Josette Arizona Velarde y, que todavía, no se ha esclarecido el motivo de su muerte, exigencia de justicia y que los culpables paguen por el delito cometido”, señaló.
“El caso, durante un año, estuvo prácticamente inerte, solamente como que hicieron algo en el ministerio público en turno, ahorita, afortunadamente, ya lo pasaron hace casi más del mes, cuando volvimos a alzar la voz a un año de su fallecimiento, por fin lo pasaron la carpeta a homicidios”, detalló.
Cabe recordar que el caso de su hija dejó muchas aristas, tras notificar su fallecimiento después de realizar una visita conyugal a Carlos Alexis, en el Cereso de Hermosillo, de donde salió sin vida, el 14 de enero del 2024, con tan sólo 23 años de edad.
De igual manera, tras los hechos, se realizó la detención de hasta 8 funcionarios, por parte de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora.
“Aquí es bien importante que los jueces no pueden emitir o vincular a proceso a las personas, si el ministerio público no hace su trabajo, entonces, la investigación estuvo mal desde el levantamiento, ha estado entorpecida, desconozco si es por la incompetencia de los ministerios públicos del poder judicial en sí mismo o por intereses particulares, porque hay que recordar que se encuentran involucrados funcionarios públicos del Estado”, declaró.
Asimismo, mandó un mensaje exigiendo que ya no se violenten los derechos para el acceso a la justicia, “es algo que no estamos inventando, lo estable el Código Nacional de Procedimientos Penales y, sin embargo, hemos sido pisoteados en ese ejercicio, el derecho a la justicia no debería ser una exigencia, es un derecho como tal, pero el desconocimiento nos deja vulnerables”.
Por último, también pidió a las familias que viven o pasan por casos similares, que no dejen de exigir justicia, que luchen cada día ante la inseguridad que hay en el país.
“No desistir, no cansarse, el mantenerse de pie hasta que la vida nos alcance, porque la verdad, aquí estamos pocas, son muchas más las que deberías de salir, pero el miedo paraliza, no tengamos miedo, vamos a vivir con miedo todos los días porque la inseguridad está presente, ahorita nada nos salva, no estamos seguras en ningún lugar, porque el propio estado es al que no le importamos”, concluyó.
ASÍ FUERON LOS HECHOS
El 14 de enero de 2024, Paula Josette Briceida Arizona ingresó al penal con la promesa implícita de seguridad por parte del Estado.
Tres horas después, fue hallada “inconsciente” y trasladada al Hospital General de Hermosillo, donde solo pudieron certificar su fallecimiento.
Las circunstancias de su muerte son alarmantes:
– Paula estuvo en contacto con un preso, Carlos Alexis Romero, quien alertó a los guardias tras supuestamente “desmayarse”.
– Esa noche no había personal médico en la prisión, y no se documentó ningún intento de reanimación en el lugar.
– Su cuerpo fue trasladado al hospital en una camioneta, llegando casi una hora después de ser encontrada.
La versión oficial que atribuye su muerte a un «infarto fulminante» ha sido puesta en duda debido a las lesiones encontradas en su cuerpo, las cuales podrían estar vinculadas a su fallecimiento.
Aunque hay siete personas señaladas como responsables, todas permanecen en libertad bajo fianza.
Este caso refleja la negligencia, la falta de perspectiva de género y la revictimización que enfrentamos las mujeres en sistemas que deberían protegernos.
Paula Josette no murió por causas naturales, su muerte es consecuencia de un sistema que falla constantemente en su deber de garantizar justicia y seguridad.