Con armas y reclamos arrancó el periodo ordinario en el Congreso de la Unión

Columna Política en Movimiento, de Angélica Beltrán

Escribe: Angélica Beltrán

El arranque del periodo ordinario de sesiones del Congreso de la Unión inició mal. Y es que tras un acuerdo “unilateral” de los presidentes de la Cámara baja, Santiago Creel y Alejandro Armenta, del Senado, se permitió el ingreso armado de la escolta del ejército, que como costumbre llega invitada a la ceremonia de inicio de actividades legislativas a rendir honores a la Bandera.

Y aunque en la Constitución se prohíbe el ingreso de armas de fuego al recinto legislativo, el evento de los honores al lábaro patrio se realizó con una escolta armada.

El absurdo fue que los presidentes Creel y Armenta trataron de vestir de constitucional el hecho, con sólo evitar el ingreso de la escolta al salón de sesiones y celebrar el acto protocolario en el vestíbulo, pero la violación a la ley se consumó con el ingreso de las armas desde un paso dentro del Palacio Legislativo.

En fin, que al senador Alejandro Armenta y al diputado Santiago Creel les espera una avalancha de cuestionamientos por parte de legisladores de MORENA y PT, sobre todo; por el cambio de fondo en el protocolo de la ceremonia, siendo que en años pasados la escolta entra desarmada al recinto de San Lázaro, como lo marca la ley.

Y ya que este miércoles el formato de la ceremonia no permitía la participación de oradores; la molestia de diputados y senadores quedó en abucheos y reclamos; pero los cuestionamientos vendrán en lo subsecuente. *Sin duda, un mal inicio en el centro político del país.

Operación cicatriz

       Fue en el marco de la plenaria de los legisladores de MORENA donde se realizó la operación cicatriz entre los dos aspirantes a la candidatura presidencial enfrentados en los últimos meses, cuya pugna ha quedado de relieve en los medios de comunicación: Sheinbaum y Monreal.

Pero en la plenaria, Ricardo Monreal, en su calidad de coordinador de la bancada mayoritaria y anfitrión del evento, reconoció el trabajo de la jefa del gobierno capitalino. Destacó que la Ciudad de México es segura y cuenta con servicios de calidad; por lo que consideró que Sheinbaum ha gobernado bien. Y le ofreció sus respetos y afecto.

La respuesta de ella no fue menor en halagos hacia el senador Monreal; a quien también le ofreció respetos y reconocimiento al trabajo legislativo realizado. Y así, ambos mostraron la diplomacia política que los caracteriza.

De este modo, con el reconocimiento mutuo entre Sheinbaum y Monreal al trabajo realizado, cada cual desde su trinchera inició la operación cicatriz entre ellos; y la tregua ordenada desde Palacio Nacional con miras a fortalecer al partido MORENA rumbo al 2024.