
Uruapan, Michoacán.- Mar CA, escribe el siguiente mensaje a Carlos Manzo, alcalde de Uruapana, asesinado ayer.
“Hoy me cuesta encontrar las palabras, porque lo que sucedió con el alcalde Carlos Manzo ha dejado un vacío imposible de llenar.
No sólo hablo desde la distancia de la política o desde la formalidad de los cargos, sino desde lo más profundo de una relación humana que me marcó.
Durante más de 8 años formé parte de su equipo, compartí su esfuerzo, su visión y sus anhelos no solo para Uruapan sino para México.
Fui su ahijada, su compañera en el camino de servicio público, y parte de su gabinete como regidora suplente.
Conocí al ser humano detrás del cargo: un hombre entregado, persistente, de palabra firme y corazón inquieto por el bienestar de su pueblo.
Carlos no sólo hablaba de transformación, la vivía.
Su manera de entender el trabajo público era intensa, a veces agotadora, pero siempre guiada por un profundo amor a su tierra y por una fe inquebrantable en que las cosas podían cambiar.
Tenía un sentido de justicia que no se fingía; creía en la gente, en la posibilidad de reconstruir el tejido de la comunidad desde el valor, la honestidad y la cercanía.
Quienes caminamos a su lado sabemos cuánto entregó, cuántas horas dedicó sin descanso, cuántas veces antepuso su deber al descanso o a la tranquilidad personal.
Hoy me duele recordarlo, pero también me enorgullece haber sido parte de su proyecto, haberlo acompañado en tantas jornadas, en reuniones, en decisiones difíciles y en esos momentos en que la esperanza se abría paso entre la adversidad.
Más allá del cargo, me queda su ejemplo. Me queda su voz firme, su sonrisa franca, su manera de mirar de frente a los problemas.
Me queda el recuerdo de un hombre que soñó con ver un Uruapan digno, seguro, próspero; un hombre que no se rindió pese a las sombras que lo rodearon.
Esta manifestación nace del afecto, del respeto y del profundo agradecimiento. Porque más que un líder político, fue un ser humano noble, que confió en mí, que me enseñó a creer en el servicio público con convicción y con coraje.
Hoy manifiesto mi tristeza, pero también mi orgullo de haber caminado junto a él. Y aunque su partida deja un silencio grande, su ejemplo quedará sembrado en cada uno de los que compartimos su causa.
Descanse en paz, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, alcalde, amigo y padrino. Tu entrega y tu memoria seguirán vivas en el corazón de quienes te conocimos y te quisimos.
-M.
¡Carlos Manzo vive en la memoria de Uruapan!
¡Porque su lucha fue por la gente!
¡Porque su entrega fue por justicia!
¡Porque su corazón quedó en este pueblo que tanto amó!
¡Hoy levantamos la voz en su nombre y por su legado!”…
9/Mayo/1995 – 1/Noviembre/2025🕳️


