Hermosillo, Sonora.- La señora Alberta Peña, abuelita de la niña Nuria Nahomi Pérez Martínez, de 8 años de edad, que muriera ayer en el volcamiento del autobús de TUFESA 535, está solicitando públicamente a la empresa responda con ayuda, pues son de familia de escasos recursos económicos, y dice, ‘ahorita no tienen ni para comer’.
Ella, junto con un hijo, llegaron a Hermosillo para estar al pendiente del estado de salud de su hija María Elena Martínez Peña y de sus otros dos nietos que se encuentran hospitalizados por el accidente, de nombre Iker y Melannia, de 13 y 11 años de edad, respectivamente.
Además de correr los trámites para que el cuerpecito de su nietecita Nuria Nahomi les sea entregado y trasladado a su pueblo natal, Villa Juárez, Sinaloa.
Quieren que la empresa les brinde ayude para su estadía en Hermosillo, y para lo que será el traslado y servicio funerario de su nieta, una vez que el cuerpo sea liberado por la Fiscalía General de Justicia del Estado.
La señora María Elena Martínez Peña se encuentra internada en el Hospital General de Estado, un tanto delicado, con serias heridas en la cabeza, en tanto sus dos otros hijos, Iker y Melannia están internados en el Hospital Infantil del Estado, en condición estable.
Ellos habían abordado el camión 535 de Tufesa en la ciudad de Culiacán, y su destino era Pesqueira, Sonora, a donde venían a trabajar.
En el camión venían ocupando los asientos 33, 34, 35 y 36, siendo el primero de ellos el de la pequeña Nuria Nahomi, hoy fallecida.
Refiere la señora Alberta Peña, están teniendo problemas para que Fiscalía libere el cuerpo de su nietecita, pues le exigen presentar acta de nacimiento, y ésta se perdió en la maleta tras el accidente, no la encuentran.
Por ser de familia de escasos recursos, viajaron ella y su hijo a Hermosillo sin dinero, sólo consiguieron los boletos del camión, y hasta esta mañana no tienen ni para comer, señala.
